Lo que hoy somos, se lo debemos a los patrones que alguien más depositó en nosotros.
Casi el 100% de las personas tienen pensamientos de escasez o abundancia gracias a las conversaciones que escucharon de sus padres y de las personas que tenían a su alrededor.
¿No te ha pasado que conoces gente que tienen como la habilidad de siempre ver menos en donde hay más y de encontrarle un problema a cada solución? Es como si estuviesen entrenadas para encontrarle siempre un desperfecto a todo y tienen en su boca frases como: "Es que yo no tengo de dónde sacar dinero", "¿Para qué yo quiero ganar más? Después mi familia me va a querer pedir dinero prestado".
Este tipo de expresiones, y un sin número de frases más son dichas por personas que estuvieron siendo programadas para la escasez cuando fueron diseñadas para la abundancia. Y de ahí quiero partir: La abundancia es tu estado natural, y quiero que sepas que tú puedes ser un excelente administrador de los recursos económicos.
Pero antes de decirte cómo lograrlo, primero quiero que tomes un minutito para preguntarte a ti misma/o: ¿Hasta qué punto mi vida económica está siendo influenciada por los pensamientos que otras personas me inculcaron?, ¿Qué tan consciente estoy de mi panorama financiero actual y que es mi responsabilidad a partir de ahora si seguir igual o hacer algo al respecto?
Si te hiciste estas preguntas y te diste esta dosis de realidad, entonces aquí te comparto esto 4 pasos con los que ciertamente darás un giro a tu manera de pensar respecto al dinero y te volverás un imán para la abundancia:
1. Establece con claridad lo que deseas manifestar.
Lo primero que haremos es decidir qué quieres tener, fijar tu intención y diseñar la
vida a tu manera.
En este punto es importante observar qué hábitos drenan tu energía y hacer los ajustes de lugar. También observar tus emociones: estas construyen o destruyen, tu día avanzará en la dirección de tus emociones.
Ejercicio: Mi meta de hoy es sentirme: ________________.
2. Limpia las creencias limitantes.
Limpia tu mente de las creencias que impiden que te sientas abundante. También es imprescindible limpiar el entorno físico de todo aquello que no te
hace sentir abundante y abriremos el espacio para que la energía pueda fluir.
Lo que hoy tenemos como "normal", en un momento fue solo una idea en la cabeza de alguien que fue lo suficientemente persistente como para convertirlo en realidad.
3. Toma acción.
Plasma y visualiza sueños y un plan de acción para manifestar los sueños.
En este proceso:
-trabaja la gratitud como hábito, y verás que la gratitud es la llave para la abundancia.
Ejercicio: 3 cosas por las que doy gracias hoy: _
-establece límites claros en todas las áreas de tu
vida: tiempo, dinero, relaciones.
4. Dejar ir y soltar.
Permítete recibir abundancia y ver manifestados tus sueños.
Deja ir el control de tener que manifestar y permite que todo fluya hacia dónde tiene que ir, confiando en que será hacia tus sueños.
por Aura Cruz.